martes, 14 de junio de 2011

Amores Gatunos

Desperté como todas las mañanas, con los sueños agotados el miembro endurecido, la vejiga a reventar, encamine mi humanidad hacia el baño, mientras rascaba mi cabeza y mis nalgas , Orión enfurecido en su maullido , me reclamaba por aquella extraña golosina de piel blanca y cabellos rojos que dormía en su lado de la cama, vaya suerte la mía, pensé al verla, era un espejismo de mujer y yo el mas novato de los cazadores, había conseguido llevarle a mi guarida, a mi fortaleza de la soledad, yo el mas novato de los cazadores había conseguido despojarla de sus prejuicios y hacerla mía…a partir de ese día mi vida no sería igual.

El teléfono repico, y mientras contestaba, ella se había despertado, y se dirigía con la suavidad y la cautela de un lince hacia él, fue allí cuando en los ojos de Orión vi que también se había enamorado de ella, a partir de ese día, la vida de mi gato no fue la misma.

Para mi sorpresa le tomo entre sus fantasmales manos, y el cedió, bajo el mágico efluvio de su aroma personal, sobre sus pechos generosos, una cascada roja y crespa, bailaba coqueta rozando eso hermosos pezones, que hace unas pocas horas retozaban en mis labios, se vistió con la lentitud de un ángel homicida, me dirigió una mirada que erizo hasta la última fibra de mis encarnaciones y con esa gracia q solo tienen los amaneceres me dijo…
No estuviste mal…¿No estuviste mal? ¿Acaso era una broma? No estuviste mal...

En los ojos de Orión brillo la burla ¿tenía que soportar esto?…pero una nueva mirada acompañada de… quieres que volvamos a vernos? desarmo en mi todo espíritu de lucha.

Era oficial mi voluntad encadenada a esas caderas y prisionera de ese pubis me abandonaba cual barco a la deriva en medio del Maelstrom.

Autor~Kether

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